Thursday, February 21, 2013

Algunas Ideas Sobre el Centro Comercial, Industrial y Anexos de Cruz del Eje



No existe un solo modelo de democracia, o de los derechos humanos, o de la expresión cultural para todo el mundo. Pero para todo el mundo, tiene que haber democracia, derechos humanos y una libre expresión cultural.
KOFFI ANAN

En un evento Emprender, de jovenes emprendedores, en General Deheza, Mayo 2010

Hace mas de diez años que formo parte del Centro Comercial, Industrial y Anexos de Cruz del Eje. Estoy asociado a esta organización gremial empresaria según lo indican sus estatutos, cumpliendo con los requisitos que allí se indican. Además participo activamente de la vida institucional, con compromiso y vocación.
Asumo que se trata de un compromiso complejo: el tiempo es un recurso escaso, los problemas son muchos y ponerse de acuerdo y obrar en consecuencia suele ser desgastante. Mas de una vez da ganas de quedarse en casa y porque se está “metido ahí”, en el Centro, claro.
Y pienso que es una buena  idea expresar ahora porque estoy yo ahí.
Varios de estos años de pertenencia al Centro Comercial los he pasado colaborando o formando parte de los equipos de trabajo del Consejo Directivo. ¿Y qué cosa hago ahí? : representar a los asociados a la institución en la toma de decisiones a cerca del rumbo que lleva la Institución y sus actividades.   Es decir, represento a todos aquellos que, al igual que yo, cumplen con los requisitos que indica el estatuto.
Soy claro y puntual en esto: sino está asociado, yo no lo represento. Y busco separar la paja del trigo, pues desde siempre escucho a mucha gente de todos los tenores frases decir aludiendo al Centro Comercial tales como “El Sector Comercial”, “Los comerciantes”, “El Sector Productivo”, entre otras. Puedo parecer un bicho raro, y cruel, pero yo represento a los asociados al Centro Comercial, un conjunto de personas y organizaciones que cumple con los requisitos estatutario, que tiene nombre y apellido, o razón social.  No represento a anónimos entrecomillados de elástica conformación. No me adjudico su representatividad ni obro en consecuencia de ello. Mi compromiso es con los asociados.
¿Y quién me puso en ese lugar de representante?... Los asociados lo hicieron, en una asamblea.  Las asambleas se hacen periódicamente, según lo indica el estatuto social. También  las reuniones de Consejo Directivo. Y las elecciones para renovar autoridades se realizan cada dos años, cualquier asociado que cumple los requisitos se puede presentar. Desde hace varios años se realizan esfuerzos para comunicarlo y lograr mayor participación.
El Mandato y la representación es una temática que quiero profundizar hacia el futuro, pues hace a la vida democrática de la institución y la participación de los asociados.   Los Consejos Directivos se renuevan cada dos años, y se componen de varios miembros integrantes.  Se eligen, como ya lo mencioné, en asamblea, y a lista completa, posibilidad de representación de la minoría…. Desde que tengo idea siempre hay unanimidad, con una sola lista, con una asamblea cuyo número de miembros presentes apenas supera a los de la lista que se presenta… y bueno, la gente no participa, no le interesa, a veces ni sabe, que le vamos a hacer.
Pero esta práctica antidemocrática e insana, además de inútil y dañina es obstaculizadora de mi trabajo y esfuerzo en la institución. Es obstaculizadora de cualquiera que trabaje y se brinde a la institución.
El planteo es sencillo: la gran mayoría de aquellos a quienes represento me eligieron por ser el único y sin ni siquiera saber que me elegían, dado el procedimiento estatutario en la asamblea de la elección.
Así, mi representatividad pierde mucho valor.
 Un anhelo hacia el futuro es un Centro Comercial representativamente sólido, desde el origen democrático y participativo mismo. En la actualidad, y desde hace muchísimos años ha sido así, quizás, hasta no  conviene así como está, pero no nos deja crecer, no nos hace mejores.… Es hora de empezar a hablarlo, de buscar alternativas y más participación.
Yo quiero representar a quienes me elijan de verdad y que mi representatividad tenga valor … y para eso hay que trabajar mucho.
Mi devaluada representatividad actual, requiere también el compromiso del asociado con lo colectivo, con el bien común. Y de nuevo voy  a ser claro: lo común, lo colectivo no tiene nada que ver lo individual, no es la suma de esto, ni mucho menos la selección de un “individual” por sobre los otros. Lo colectivo es otra cosa distinta y totalmente diferente, es democrático, equitativo, plural, justo y representativo.
He escuchado un sinfín de veces decir “el centro comercial defiende o debe defender los intereses de los comerciantes”.  Y otra vez me sale el  bicho raro: Antes, ahora o después  yo no defiendo, institucionalmente, el interés de nadie en particular ni en sumatoria… Represento y obro  en consecuencia para el bienestar colectivo de los asociados al Centro Comercial.
Yo quiero que el asociado al Centro Comercial, Industrial y Anexos de Cruz del Eje VIVA BIEN.  Quiero que el resultado de la pasión, el esfuerzo, la vocación y el profesionalismo que ponen cada día en su actividad le permitan disfrutar de la vida de la mejor manera, con su familia, con sus seres queridos. Quiero que sus colaboradores y su personal se comprometan con su trabajo y reciban una justa remuneración por ello. Quiero que encuentren nuevos horizontes de producción, que sus clientes y proveedores hagan excelentes negocios, que mejore la calidad, la atención. Que se paguen impuestos justos por prestaciones justas. Que formen parte activa de la dinámica social. Y  por sobre todas las cosas, que la dignidad y el bienestar fruto de cada actividad permita sentirse orgulloso de pertenecer y estar contenido y representado  la Institución.
Sigue, invitarlos a asociarse al Centro Comercial de Cruz del Eje, a participar, a dialogar, a preguntar, a responder, a discutir, a exigir, a caerse, a levantarse y a empezar de nuevo, una y otra vez.  A trabajar para lograr que la asociatividad y representatividad  tengan valor .